Sin nada que añadir

Ya se ha encargado Abrahamdale de narrar (muy fielmente) la experiencia vespertina de este viernes.
Para remarcar lo importante, fui yo la que me dormí, pero ese "don" perfeccionado que voy adquiriendo a base de madrugones para ir a trabajar, junto con los habituales "cinco minutos más y me levanto", han hecho de mí una experta en optimizar el tiempo para salir a la calle sin llamar la atención en un máximo de veinte minutos.
Lo de la cola de Pradillo, al llegar ha sido de lo más desalentador, para haceros una idea:Igual que en las comisarías un mes de agosto y la gente renovando el pasaporte. Cuando me estaba mentalizando de que nos dieran las doce sin haber entrado, aquella masa humana ha empezado a moverse y la gente entraba como en las rebajas de enero. El momentazo de "mi amigo" para pasar el detector: -espere señor guardia que me voy sacando los veinte mecheros, quince bolígrafos, pilas, tres adaptadores de USB, creo que ya está todo...ay no, espere que me falta sacar el GPS y también los caramelos Mentos.... Ha sido desternillante, sin contar con el juguetito de Doctor Who, que como buen friki lo atesora en su indumentaria diaria...la cara del policía era un poema, y la mía, un chiste.
La cola de los expedientes matrimoniales (los civiles, que también está la de los matrimonios canónicos)...avanzaba a la misma velocidad que un paso de Semana Santa pero por fin, hemos dado el paso 2 de 3 en esto de burocracia...y he necesitado dos horas de siesta para recuperarme.
El 2 de julio a las 13 horas, estaremos (sin necesidad de hacer cola) para que inicien definitivamente el expediente, y podamos dar por zanjado los primeros papeles (importantes) de esta etapa.
Desde aquí vuelvo a agradecer a Nuri, su altruismo,amistad y paciencia, por hacernos este favor (eres el refuerzo)...y nada más seguiremso informando.
¡Hasta pronto!